El ejercicio tiene muchísimos beneficios. La mejor manera de beneficiarnos de ellos es ser constantes en nuestro día a día. Ser constantes requiere muchas veces sacar tiempo de donde no lo hay y fuerzas cuando apetece descansar.
Para que os cueste menos sacar esa energía y motivación os contamos estos beneficios que podéis conseguir siendo constantes en vuestras rutinas de ejercicio.
Sabias que...
- 30-40 min de ejercicio aeróbico aumentan la producción corporal de endorfinas, una sustancia química del cerebro que se une a los receptores opiáceos en el sistema de control del dolor en el cerebro y la médula espinal disminuyendo la percepción del dolor. Las endorfinas actúan de forma similar a los fármacos analgésicos.
- Una adaptación que el ejercicio físico causa es la mejora de la circulación coronaria, que se debe, entre otros, al fenómeno de capilarización, que consiste en un aumento de la densidad capilar (número de capilares por miofibrilla).
- El ejercicio físico disminuye la resistencia a la insulina, puesto que el tejido muscular aumenta su capacidad de captación de glucosa, disminuyendo el riesgo de diabetes mellitus tipo 2 y, una vez establecida, ayuda a controlar la glucemia e incluso, en algunos casos, llega a reducir las necesidades de fármacos antidiabéticos y/o insulina.
- Las personas mayores de 65 años que practican ejercicio físico moderado disminuyen un 50% su mortalidad cardiovascular.
- El ejercicio es moderadamente eficaz para reducir la fatiga y mejorar la calidad de sueño en pacientes con fibromialgia.
- El ejercicio acelera la actividad intestinal y hace circular los alimentos a través de nuestro sistema digestivo de forma más ligera. De este modo aumenta el mejor uso y asimilación de los nutrientes además de la eliminación de las toxinas que acumulamos.
- Trabajar la musculatura glútea (puente glúteo) mejora la estabilidad de la cadera, mejora la eficacia del movimiento de las piernas y reduce los problemas de dolor de espalda.
- El Pilates hace que puedas hacer movimientos eficientes, lo que reduce la posibilidad de lesiones, y mejora el tiempo de reacción y el equilibrio.
- Desde que uno cumple 40 años, se va perdiendo alrededor del 1% de la misma al año, un porcentaje que se acelera en las décadas siguientes. La única manera de frenar esa pérdida es el ejercicio.
- El ejercicio mejora tu plasticidad cerebral y ayuda a generar nuevas neuronas.
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