Va a llegar pronto el buen tiempo y apetece más hacer deporte, paseos , excursiones…
Para ayudaros a tener un poquito más de motivación , os contamos algunos de los muchos beneficios que tiene el ejercicio.
Sabias que...
- Los beneficios del ejercicio también son transmitidos de padres a hijos. Los cambios ‘epigenéticos’ que se acumulan en el esperma inducidos por el ejercicio sugieren que los efectos positivos del ejercicio realizado por los padres podrían acabar siendo transmitidos a los hijos.
- Tan solo 3 semanas de reposo en cama a los 20 años son tan perjudiciales como 40 años de envejecimiento.
- El ejercicio disminuye la atrofia cerebral (pérdida de neuronas) y aumenta el volumen del hipocampo (el centro de la memoria) y, por tanto, la reserva cognitiva (aumenta las capacidades intelectuales).
- La presión arterial sistólica y diastólica en reposo se reduce con todas las modalidades de ejercicio realizadas de forma regular.
- Durante el ejercicio se produce la hormona Irisina que mejora la memoria, el aprendizaje y reduce el riesgo de demencia.
- La realización de actividad física puede generar variaciones en la microbiota intestinal a través de mecanismos como el aumento del tránsito intestinal, la secreción de hormonas o la liberación de miocinas (proteínas que ayudan a mejorar el funcionamiento muscular).
- Las personas que eran físicamente activas a los 65 años tenían entre dos y cuatro veces más probabilidades de envejecer saludablemente (definido como envejecer sin patologías cardiometabólicas, depresión, o deterioro físico o cognitivo) que las que eran inactivas.
- Los pacientes con cáncer que se mantienen activos físicamente tras el diagnóstico tienen un 22% menos probabilidad de fallecer por dicha enfermedad que los que permanecen inactivos.
- Aquellas personas más activas gozan de una comunidad microbiana con mayor diversidad, estabilidad y resistencia a la invasión de patógenos, lo que ayuda a “restaurar” la disbiosis intestinal que puede provocar, por ejemplo, la toma de antibióticos .
- Un estudio en personas de más de 90 años mostró que realizar ejercicio de fuerza 2 veces a la semana durante 8 semanas era suficiente para aumentar de forma significativa la fuerza de estos pacientes. Ésta mejora en la fuerza de piernas implicó también un menor riesgo de caídas.
¿Necesitas más motivos?